CLEVELAND – LeBron James, como lo ha hecho innumerables veces en esta cancha en esta arena, entró a la cancha y explotó para una volcada con una mano, su jugada característica en la ciudad que una vez trajo campeonatos.
Fueron los primeros puntos del juego, una noche en que los fanáticos de los Cavaliers lo celebraron no solo por su regreso al noreste de Ohio, sino porque regresó a casa con su hijo, Bronnie, como compañero de equipo.
Pero la fiesta se acabó cuando abandonó el terreno de juego y lanzó el balón al árbitro tras su sexta sustitución. Al menos para el James de mayor edad en la plantilla de los Lakers.
Los cánticos de “Queremos a Bronny” llenaron a Rocket Mortgage en casi todas las paradas del cuarto hasta que JJ Redick cedió y dejó que el guardia junior jugara cerca de su ciudad natal.
Todo estaba por ver el miércoles por la noche, con los Cavaliers permaneciendo invictos mientras James sufrió su peor derrota en Cleveland, perdiendo 134-110 ante los Lakers en un partido en el que estuvieron fuera durante casi 48 minutos.
Cleveland atacó a los Lakers con tamaño y físico, neutralizando a Anthony Davis y James en la canasta. Y su tiro, que el nuevo entrenador de los Cavs, Kenny Atkinson, advirtió que podría ser un poco de oro antes del partido, no ha estado ni cerca de disminuir.
Los Cavs anotaron ocho triples en sólo 13 intentos en el primer cuarto y también anotaron sus nueve triples, una hazaña en el baloncesto moderno donde los equipos intentan cazar tiros al aro y detrás de la línea.
LeBron James lideró a los Lakers con 26 puntos y Davis anotó 22 puntos con 13 rebotes, pero ninguno tuvo impacto en el juego. Ningún Lakers lo hizo.
Y aunque los Cavs superaron a los Lakers en tiros de tres al principio, fue su transición y defensa interior las que se volvieron más brutales. Jarrett Allen y Evan Mobley se combinaron para 44 puntos con casi el 60 por ciento de tiros.
Cleveland lideraba por 19 después del primer cuarto y el juego nunca estuvo cerrado después de eso.
Bronnie James recompensó la paciencia de los fanáticos de Cleveland que se quedaron, encestando un tiro en salto de media distancia al final del último cuarto para sus primeros puntos en la NBA.