Esta decisión se tomó a partir de la solicitud del Ministerio del Interior de Uruguay.
Luego de tensiones por temas de seguridad, el partido entre Peñarol y Botafogo se jugará en el Estadio Centenario de Montevideo con dos aficionados presentes. Previsto para iniciar a las 21:30 horas del miércoles 30, el partido de ida de la semifinal de la Libertadores se jugará en el Campeón del Siglo, casa de Uruguay.
La opción de ubicación se consolidó luego de conversaciones entre los clubes, la CONMEBOL y la Federación Uruguaya de Fútbol. En conferencia de prensa, el Ministerio del Interior aseguró que las autoridades podrían facilitar la seguridad de los dos aficionados en el Centenário debido a la estructura y ubicación.
Centenário tiene una capacidad de unos 60 mil seguidores, unos 20 mil de Campeon del Siglo, que tiene 40 mil. Además, el estadio está ubicado en una zona céntrica de la capital uruguaya.
La semana pasada, Río de Janeiro fue testigo de un conflicto con la afición de Peñarol. Tras la pelea con los nadadores y la policía, 250 uruguayos fueron detenidos. Al menos siete personas resultaron heridas durante los disturbios.
El Botafogo tuvo un buen desempeño en el campo y ganó por 5-0. Para el partido de mañana, el Ministerio del Interior incluso solicitó que el partido se juegue únicamente con aficionados de Peñarol. Pero esta opción fue rechazada por la Conmebol, quien exigió que se cumplan las reglas con la presencia de aficionados de ambos equipos.