“Cuando empezamos no vendíamos ni media cabra”, afirma Barajas. “De boca en boca y de fe, comenzamos a avanzar semana tras semana. Hay mucha gente que hace birria. Pero tiene que ser de chivo y tiene que tener tu mole especial, algún tipo de aderezo, tu propia receta. Quizás por eso tenemos buenos clientes, porque hacemos de todo todos los días”.
El pedido más popular es el plato birria de chivo con pistola, un plato de carne de cabra picante bañado en un consomé servido con vieiras, tortillas, cebollas, cilantro, rábanos, chiles y rodajas de lima. Crea tus propios tacos. Hay tacos normales, por supuesto, y tacos dorados, asados y fritos, con queso si quieres quesabirria. Cada pedido viene con un pequeño taco de frijoles horneados, y los frijoles son una receta de la abuela de Barajas, quien falleció a principios de este año. “Mi abuela le decía a mi padre: ‘Haz un gesto bonito a los clientes'”, cuenta Barajas. Y una vez al mes, Barajas le prepara al señor Montalayo una bola frita de estómago de cabrito con tripas parecidas a una salchicha cortada en rodajas; taco.