Palmeiras afrontará una etapa crucial en el Campeonato Brasileño en 2024 y, para tener posibilidades de conquistar el título, el equipo de Alviverde necesitará superar ausencias importantes. En el último partido, el equipo ganó 1-0 contra Gremio, acortando la distancia con el líder Botafogo a cuatro puntos y manteniendo la competencia cerrada. Este resultado sobrevive […]
Palmeiras afrontará una etapa crucial en el Campeonato Brasileño en 2024 y, para tener posibilidades de conquistar el título, el equipo de Alviverde necesitará superar ausencias importantes. En el último partido, el equipo ganó 1-0 contra Gremio, acortando la distancia con el líder Botafogo a cuatro puntos y manteniendo la competencia cerrada. Este resultado mantiene vivo un año más el sueño de la afición del Palmeiras. El equipo de Abel Ferreira tiene la mejor defensa de la liga, concediendo sólo 20 goles en 35 partidos y manteniendo una racha de 14 partidos invicto. Demuestra el buen trabajo defensivo del equipo, que se ve reforzado por el papel de Gustavo Gomes, pero puede que no esté presente en los próximos partidos.
Palmeiras también tiene uno de los mejores ataques de la competición, anotando 46 goles y sobresaliendo en la creación de ataques y liderando las oportunidades creadas (77 hasta ahora). El joven máximo goleador Estevao jugó un papel decisivo en esta actuación, con 12 goles que lo colocaron en la cima de la artillería brasileña. Sin embargo, Estevao estará suspendido para el próximo partido contra Bahía por una tercera tarjeta amarilla, baja importante para Palmeiras, y también deberá estar en el banquillo ante Uruguay por Brasil el día 19, un día antes del choque con Brasil. Oh Bahía. Su ausencia en esta fase final preocupará al técnico Abel Ferreira, más aún que Felipe Anderson y Flaco López hayan pasado por una fase baja.
Además de Estevao, Palmeiras no podrá contar con Mikey y Richard Ríos, también suspendidos, mientras que la situación de Gustavo Gomes sigue siendo incierta debido a su convocatoria a la selección paraguaya. Tendrá problemas logísticos para regresar a tiempo para el choque con Bahía, lo que dejará al técnico Abel Ferreira en una posición difícil. Es probable que Abel necesite adaptar el sistema defensivo y encontrar reemplazos para mantener la estabilidad en la división que ha sido crucial para la buena campaña de Palmeiras.
La situación se complica aún más teniendo en cuenta la secuencia de los partidos decisivos. Tras el choque con el Bahía, el Palmeiras se enfrentará al último clasificado, el Atlético-GO, antes de un partido crucial contra el Botafogo. El enfrentamiento con el Botafogo, previsto para el 26 de noviembre en el Allianz Park, podría decidir la suerte del campeonato. La victoria del Verdao sobre el Botafogo le da al equipo la oportunidad de tomar la delantera, sobre todo si el Botafogo tropieza en los partidos anteriores, lo que hará de cada partido una “semilla” para los hombres de Abel Ferreira.
A pesar de la ausencia, el Palmeiras tiene una plantilla talentosa y una fuerte campaña tanto en casa como fuera, siendo el segundo mejor equipo en ambos aspectos. La expectativa es que el equipo utilice su fuerza colectiva y su experiencia en la toma de decisiones para mantener un nivel de competitividad y superar las dificultades de la secuencia de juegos y la ausencia de jugadores clave.