Estábamos muy entusiasmados con la banda que apareció antes que ella, Sublime, y después de una gira larga e irregular con un cantante comprometido pero ajeno a la estética e intensidad original del mismo combo (Rim Ramírez), la atención fue renovado ante los fans con la incorporación de Jacob Nowell, hijo de Bradley Nowell, el asediado líder, que murió en mayo de 1996 mientras la banda estaba a punto de terminar. obtener acceso. al estrellato.
Nuestra debilidad por Sublime también tiene que ver con el hecho de que, en lo que respecta a la cultura popular, es una de las instituciones musicales más influyentes en Long Beach, California, donde vivimos. Hace unos meses tuvimos la oportunidad de ver a la nueva alineación (incluidos los fundadores Bad Gau – batería y Eric Wilson – bajista y secuenciador) durante la inauguración del US Open of Surfing, y nos dejó algo muy agradable. impresión Esta vez la situación fue un poco diferente.
En el Foro, el quinteto actual (al menos en lo que a directo se refiere) se vio afectado por un mal sonido que perjudicó la calidad de su repertorio, así como por un Jacob aparentemente desinteresado, olvidando partes de la letra, al menos en At Primero, no le da suficiente fuerza para alcanzar su voz. Hubo otra situación extraña relacionada con la extensión del set, pues mucho antes de que finalizara, a los músicos les dijeron que ya habían aumentado su tiempo en el escenario, pero continuaron con su trabajo.
De todos modos, fue agradable volver a escuchar clásicos como “Rape”, “Bad Fish”, “What Happened” y por supuesto “Santeria”. A diferencia de 311, Sublime hace una mezcla de rock, reggae, ska y punk (o lo hizo, porque todas las canciones reproducidas eran antiguas) lo cual es absolutamente emocionante y, al menos en el Foro, está realzado con color y maravilla. Vídeos proyectados en una pantalla trasera gigante.
No hace mucho, el cuarteto Jimmy Eat World, de Mesa, Arizona, presentó con profesionalismo y dedicación una oferta que, como ya se sabe, se enmarca dentro de los lineamientos del pop-punk, es decir, una rama dirigida a los gustos de masas. Cerraron su set con el inevitable éxito ‘Medium’, pero no pudieron resistir la tentación de sumergirse en el espíritu navideño, lo que los llevó a versionar ‘Last Christmas’ de Wham! que aprovechamos para volver (aunque estamos seguros que otros asistentes quedaron contentos con esta decisión).
La transmisión vespertina, que duró seis horas, terminó con la intervención de AwolNation, Linda Lindas y bby. Además del espectáculo, el festival sirvió para recaudar fondos para Para Los Niños Heritage Center y Al Wooten Jr., organizaciones dedicadas a promover la educación juvenil en Los Ángeles.