Robert Eggers está muy ocupado. Un día después de preparar su próxima película, Werewolf, en Focus Features, el director de Nosferatu y The Northman firmó un acuerdo con TriStar Pictures para dirigir la secuela de Labyrinth.
Labyrinth, estrenada en 1986, estaba protagonizada por Jennifer Connolly como una adolescente que, frustrada por cuidar a su hermanito, desearía que los duendes se lo hubieran llevado en un libro de fantasía que estaba leyendo. Su deseo es concedido por el Rey Goblin, Jareth, interpretado por David Bowie, quien le da 13 horas para encontrar a su hermano en un laberinto mágico antes de que se convierta en un duende para siempre.
Originalmente un éxito de taquilla de 34 millones de dólares con un presupuesto de 25 millones de dólares, Labyrinth se convirtió en un clásico gracias a la actuación de Bowie y los intrincados títeres creados por el director Jim Henson y su equipo. Los detalles sobre la trama de la secuela se mantienen en secreto.
Junto con la secuela, Eggers también está creando Werewolf, una historia de hombres lobo del siglo XIII que será lanzada por Focus Features en 2026. Chris y Eleanor Columbus están produciendo la película a través de Maiden Voyage, y Eggers coescribió el guión con John Northman. Eggers trabajará con el mismo equipo de guionista y productor en la secuela de Labyrinth.
Eggers, que ya tiene seguidores en películas de terror como The Witcher y The Lighthouse, ha visto su estrella ascender durante el último mes gracias a Nosferatu, una nueva versión del clásico de terror vampírico de 1922.
La película, que obtuvo cuatro nominaciones al Oscar el jueves, está en camino de superar los 100 millones de dólares a nivel nacional y actualmente es la segunda película con mayor recaudación en la historia de Focus Features, sólo detrás de “Broken Mountain”.
Eggers está representado por WME y Frankfurt Kurnit Klein & Selz. Su contribución a “Labyrinth” fue reportada por primera vez por Jeff Snyder.