CIUDAD DE PANAMÁ – El feriado nacional de Panamá, que conmemora el asesinato de 21 manifestantes a manos de policías y soldados estadounidenses en 1964, se produce mientras el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, amenaza con recuperar el control del Canal de Panamá.
El 9 de enero de 1964, estudiantes de la Zona del Canal, que en ese momento estaba bajo control de Estados Unidos, protestaron porque la escuela secundaria de allí no izaba la bandera panameña. Las protestas se convirtieron en una oposición general a la presencia estadounidense en Panamá y participaron tropas estadounidenses.
Los historiadores dicen que lo que se conoció como el Día de los Mártires fue un punto de inflexión clave que llevó a la firma de un acuerdo de más de una década por parte del presidente Carter para entregar el control del canal a Panamá el 31 de diciembre de 1999.
Este año, la festividad coincidió con el funeral de Carter en Washington. El expresidente falleció el 29 de diciembre a la edad de 100 años.
Pero Trump está adoptando un enfoque expansionista en su segundo mandato y el martes descartó utilizar la fuerza militar para tomar el control del Canal de Panamá. En las últimas semanas, Trump se ha quejado del aumento de los peajes para los barcos que transitan por el canal y ha sugerido que Estados Unidos lo retire.
Se trata de una propuesta que fue rechazada por el presidente de Panamá, José Raúl Molino.
El jueves, Esmeralda Orobio, prima de uno de los asesinados en 1964, dijo en una ceremonia: “El Canal de Panamá es nuestro y lo defenderemos”.
Michael Shifter, expresidente del Diálogo Interamericano en Washington y profesor adjunto en la Universidad de Georgetown, calificó el discurso de Trump como una “amenaza vacía”.
“La idea de que Trump vaya a recuperar el canal por la fuerza no es realista”, afirmó.
Zamorano escribe para Associated Press.